Translate

miércoles, 11 de septiembre de 2013

MARTA

En mi última entrada dije que Marta se había quedado algunos días más en mi casa. No nos vimos mucho durante ese tiempo salvo algún día a la hora de la cena, porque su vida era la playa.

Me contó una cosa interesante. Dijo que conocía a mis amigos RL y DB. Bueno, quien dice conocer… La zona de marcha de mi ciudad natal es muy pequeñita y de cuando en cuando mi hermana se encuentra con mis amigos y como es normal, se saludan, se cuentan un par de cosas y hasta otro día. Pues por lo visto, en varios de esos encuentros también estaba Marta.

Marta me dijo que nos parecíamos, no físicamente, claro, sino en nuestra forma de ser. Y después de un buen rollo contándome lo que eso significaba, me dijo algunas cosas que me parecieron interesantes:

Una de las cualidades más atractivas que las mujeres encuentran en los hombres es que sean echados para adelante, que se coman el mundo. Nosotros, en cambio, damos la impresión de en vez de estar “echados para adelante”, estar “echados para atrás”. Por ejemplo, en una boda, a la hora del baile no sólo no nos acercaríamos a las chicas sino que espantaríamos a las que quisieran acercarse con nuestro lenguaje corporal que dice “Yo no, yo no”.

Ella cree que en un principio, de pequeños, cuando se nos abrían nuevas posibilidades (a los 16 años buscar novia, a los 18 sacarse el carnet de conducir, etc.) teníamos cierta ilusión, pero a la vez miedo, temor a no dar la talla. No supimos plantarle cara al temor y se ha ido haciendo cada vez más fuerte hasta tal punto que a día de hoy ya ni siquiera vemos lo que tenemos delante, es decir, ya no pensamos en tener pareja ni en casarnos. Tampoco pensamos en transformar nuestros fofos cuerpos en cuerpos sanos.

¿Por qué? Porque hemos permitido que le temor a lo nuevo sea tan fuerte que domina nuestra vida y no pensar en cosas nuevas permite mantener alejado el temor de nuestra vidas.

Y lo peor de todo es que resulta que estoy de acuerdo.

1 comentario:

  1. Cuando he empezado a leer lo de "Una de las cualidades más atractivas que las mujeres encuentran en los hombres" ya me ha dado pereza el tema, no me gustan esas generalizaciones porque tengo claro que eso es cuestión de gustos. Aunque sí que es posible que haya gustos mayoritarios, pero sentirme ajena a ellos sólo me hace sentir más "rara". Y ya soy bastante rara por muchos motivos así que en cuestión de gustos siempre defenderé que es algo muy personal. Pero luego he seguido leyendo y no me he podido sentir más identificada así que me temo que soy otro ejemplo que valida esa teoría de que tienen éxito amoroso los "echados para adelante" (si es que también es una cualidad valorada por los hombres heteros) porque es verdad que yo podría ser definida perfectamente como "echada para atrás" y también soy virgen (igual que tú, sin besos ni ná de ná).

    Tengo 25 años y siempre había tenido esa idea que dices en otras entradas de esperar que las cosas se solucionen con el tiempo pero ya hace varios años que me he dado cuenta de que eso no pasa, la magia no existe y soy yo la que tengo que hacer algo pero me siento incapaz.

    Lo de que las mujeres lo tenemos “más sencillo" puede ser cierto hasta cierto punto. Es verdad que pienso que si fuera a bares o discotecas en algún momento algún chico intentaría ligar conmigo (no soy precisamente una belleza pero sé que siempre hay hombres no tan exigentes o más desesperados) pero la verdad es que eso no dejaría de ser una relación esporádica semejante a ir a un gigoló (por otro lado no porque alguien te entre te tiene que gustar). En cualquier caso, aunque se diera la situación ideal de que me pudiera servir para conocer a alguien interesante y poder llegar a tener una relación, lo cierto es que me siento completamente incapaz de relacionarme de esa manera con un hombre, a duras penas sé hacerlo de forma simplemente amistosa como para pensar en ligar, el miedo me paraliza, no puedo hablar, miedo a hacer el ridículo, a que me rechacen, a que se burlen de mí… por eso sé que la situación no cambiará con el tiempo, porque no tengo ninguna clase de cercanía con nadie, por lo que no hay ni puede haber oportunidades.

    Me pasa exactamente lo que has dicho aquí, el temor domina mi vida. Me pasa en otros sectores de mi vida, como el laboral, pero con el amoroso no puede ser más fuerte, con lo que al final alejo de mis pensamientos la posibilidad de poder llegar a tener pareja, manteniendo la fantasía de que puede que en el futuro mágicamente pase algo que cambie la situación. Sé que es una falsa esperanza pero de algún modo es una idea que tengo interiorizada y me da cierto consuelo.

    En fin, he descubierto este blog hoy, me ha parecido muy interesante y me he puesto a leer entrada tras entrada, no sé por qué en este punto ha sido que me ha dado el impulso de escribir pero menudo tochaco me ha salido, da igual, tampoco esperaba que me leyera nadie.

    Todavía no he leído más pero veo que tú última entrada fue en 2014, espero que te vaya bien actualmente, un saludo :)

    ResponderEliminar