Veréis, hace unos pocos años hice un curso. Un par de años más tarde hubo que ir a recoger el título (que no valía para nada). Allí me encontré con varios compañeros/as. Estaba hablando con una chica cuando se acercó otra a saludar. Cuando se fue, la chica con la que yo estaba hablando dijo “Está muy guapa, ¿verdad?”. La verdad es que era muy fea, pero como “Todo el mundo es guapo”…
Yo no tengo ni Facebook, ni Twitter, ni esas cosas.
Pero ¿Os habéis fijado qué pasa cuando una chica pone una foto suya?
Inmediatamente se llena de comentarios de tías que dicen “Guapa”, “guapísima”, “Más
guapa y no naces”… A veces hay algún tío que también pone algún mensaje
semejante, pero son los menos.
También cuando se envían emails o whatsapps, que
suelen comenzar con “Hola wapa”, u “Hola wappa”.
Todo el mundo es guapo, sobre todo las tías, aunque la
tía en cuestión sea el paradigma de lo feo. Lo políticamente correcto es que
las tías se llamen guapas entre sí. A los tíos también les suele caer algo,
pero lo que es más frecuente es lo de las tías llamándose guapas entre sí.
Pues cómo no, lo políticamente correcto también me
cayó a mí recientemente.
Tengo una compañera de trabajo a quien llamaremos
Noelia, que es un solete.
Por lo visto, un día estaba hablando con sus compañeras de trabajo de los
chicos/hombres del trabajo y sonó mi nombre. Imagino que tan rápido dijeron mi
nombre pasarían al siguiente pero a Noelia se la ocurrió decir que “Tampoco
está tan mal, tiene su cosa”.
Y por abrir la boca, la cagó. ¡Ay, la corrección
política!
¿Qué cosa tenía yo? Quién sabe. Lo que tengo son 114
kilos encima (me pesé ayer) y guapo, lo que se dice guapo no soy. No hace falta
verme la cara, mi curriculum lo dice todo: si con 41 años no te has comido una
rosca es que guapo guapo no eres.
El caso es que alguien lo contó por ahí y durante varios días estuvieron
tomando el pelo a Noelia. Lo sé muy bien porque varios tíos y tías no paraban
de decirme que Noelia quería decirme algo. Así que una vez fui donde Noelia para
ver qué quería y me dijo que nada, que se habrían equivocado. Otra vez que fui
me preguntó una cosa del trabajo absolutamente de novatos (ya no sabía ya ni
qué hacer la pobre). Otra vez era para decirme que me apetecía un caramelo.
¿?????
En fin, que por haber abierto la boca la tomaban el
pelo de mala manera.
El jueves pasado en una conversación de pasillo nos
reunimos varios compañeros, y entre ellos estaba Noelia. Así que Arturo (el
cizañero mayor) comenzó a hacer el tonto y a poner en aprietos a Noelia sacando
el temita de manera más o menos disimulada. Al final Noelia tuvo que hablar para
que se acabaran los jueguecitos.
“A ver, yo dije que Ricardo tenía su cosa o su punto
y es verdad. No está tan mal” –todo esto lo dice mirando a Arturo.
Mi lectura: Si dice que no
estoy “tan” mal, es que sí que estoy mal, aunque no “tanto”.
Y Arturo el cachondo va y dice “O sea que te pone”.
Noelia, que ya estaba por mandarles a la mierda a
todos, dice “No es que me ponga [aquí desvía la mirada y me la dirige a mí por
un segundo]. Por ejemplo Richard Gere es atractivo. Tiene algo, una mirada, una
forma de ser, lo que sea. Pero yo no sería su pareja, porque tiene
como 60 años.”
Aquí se ríe todo el mundo y después de una pausa
Noelia continúa. “Vale, no es que sea como Richard Gere, pero también tiene su atractivo.
Y si tuviera 10 años menos y yo no tuviera novio quizá le contraría atractivo,
no sé.”
Mi lectura: Aquí está
diciendo: vale, he dicho alguna cosa buena sobre él y ya no me puedo retractar
porque está delante, así que pongo una excusa, la de la edad (tengo
7 años más que ella) y listo.
Arturo “O sea, que es viejo”.
Noelia “No es que sea viejo, pero en una pareja
busco que seamos más o menos de la misma edad, que tengamos cosas en común… ”
Mi
lectura: Aquí habla de parejas ¿Qué parejas? Estamos intentando averiguar cuál
es esa “cosa” que tengo. ¿Quién ha hablado de parejas” Porque puedo tener la “cosa”
sin ser su pareja ni la de nadie.
En vaya lío que se metió Noelia con lo de la
corrección política. Seguro que ya ha aprendido la lección y no llama guapo, wappo o lo que sea a ningún tío que no lo sea de verdad. Más que nada por si lo escucha Arturo.